Nací en 1632, en la ciudad de York, de una buena familia, aunque no de la región, pues mi padre era un
extranjero de Brema1 que, inicialmente, se asentó en Hull2. Allí consiguió hacerse con una considerable
fortuna como comerciante y, más tarde, abandonó sus negocios y se fue a vivir a York, donde se casó con
mi madre, que pertenecía a la familia Robinson, una de las buenas familias del condado de la cual obtuve
mi nombre, Robinson Kreutznaer. Mas, por la habitual alteración de las palabras que se hace en Inglaterra,
ahora nos llaman y nosotros también nos llama mos y escribimos nuestro nombre Crusoe; y así me han llamado
siempre mis compañeros.