Cuando eligieron a Dani para que se presentara a la alcaldía de Paradise Pines, en principio se negó en redondo. Viuda, con una hija pequeña y propietaria de una peluquería, estaba demasiado ocupada.
El guapo alcalde Cole Sullivan estaba intrigado por su oponente y pretendía seducirla, pero Dani se negaba a dejar que Cole la sedujera como hacía con todo el mundo…